En el kilómetro 213 de la décima etapa entre Belén y La Rioja, Carlos Sainz se ha visto obligado a parar debido a la rotura del separador entre la caja de cambios y el motor. El Peugeot 2008 DKR número 303 ha llegado al vivac remolcado por el camión de asistencia. Después de un análisis completo, los ingenieros del equipo han visto que era imposible reparar y que Carlos Sainz y Lucas Cruz continuasen en el Rallye Dakar 2016.
Los españoles ocupaban el liderato de la general de la prueba antes de que se disputase la décima especial. Carlos y Lucas habían logrado dos victorias de etapa.
Carlos Sainz: “Estoy decepcionado, como es normal, pero a la vez contento, creo que hemos hecho un buen Dakar. Iniciar el raid con el mazazo de estar parado catorce minutos y medio fue un palo duro, a partir de ahí recuperamos y el azar quiso que en la dura etapa de Fiambalá abriéramos pista y la cosa se complicara. El Peugeot 2008 DKR ha ido bien, me lo he pasado bien y he disfrutado. He trabajado duro en hacer el coche competitivo, esa responsabilidad cayó en mí y era parte del reto cuando decidí empezar este proyecto con Peugeot. El paso adelante desde el año pasado es obvio”.